Voy a contarte con este cuento
tal como veo y como siento,
que es una madre.
Es muy cortito de sólo un momento
tú quietecito, y escucha atento,
si aún no lo sabes.
Esa mujer que tocaste
na' más que naciste,
a la primera que hablaste
y primera que viste.
Ese angelito que te tuvo dentro,
bien guardadito, como en un templo,
ésa es tu madre.
Una madre es algo más
que el triunvirato del amor
de la amistad y de la verdad.
Las manos de una madre no se tocan
si no es la tierra de tu universo.
Y una madre es mucho más
porque ante el hijo siempre se arrodillará,
y a las espinas que les pueda lastimar
y hacerlas besos.
Ella es la paz y la calma
que riegan tus sienes,
y es el vacío en el alma
cuando no la tienes.
Es la razón más bonita para los abrazos,
la orillita del descalzo
y que el suelo no te queme.
Ella es la niña, ahora vieja
que tu alma retiene,
y es la que nunca te deja
y siempre te viene,
y siempre te viene...
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