Amor te quiero libre
de esposas y ataduras;
libre de la fragancia
pastelosa y rancia
de celos sin cura.
Ni anillos, ni alianzas
que denoten posesión,
porque este mundo y la calle, son más bonitos que yo.
Libre tu camino que no está libre de errar,
por tu alma noble, pura y loca.
Que cuando se te enrreda,
que cuando se equivoca,
no hay una muestra sincera, más dulce, ni verdadera, que los besos de tu boca.
Mas ponte bien bonita,
anda segura y con garbo,
y luce divina el cuerpo
del pecado, que el tiempo marchita y no paran los años.
Recorre la noche junto a tus amigas, testigos eternos de tus correrías,
y vacila al fantoche que va de machote brindando ironía.
Por si pasado el tiempo,
el verde incandescente
de tus ojos sigue ardiendo,
en la última estación
y sin quedar ninguna espina, agarraita a la mano me digas:
de esposas y ataduras;
libre de la fragancia
pastelosa y rancia
de celos sin cura.
Ni anillos, ni alianzas
que denoten posesión,
porque este mundo y la calle, son más bonitos que yo.
Libre tu camino que no está libre de errar,
por tu alma noble, pura y loca.
Que cuando se te enrreda,
que cuando se equivoca,
no hay una muestra sincera, más dulce, ni verdadera, que los besos de tu boca.
Mas ponte bien bonita,
anda segura y con garbo,
y luce divina el cuerpo
del pecado, que el tiempo marchita y no paran los años.
Recorre la noche junto a tus amigas, testigos eternos de tus correrías,
y vacila al fantoche que va de machote brindando ironía.
Por si pasado el tiempo,
el verde incandescente
de tus ojos sigue ardiendo,
en la última estación
y sin quedar ninguna espina, agarraita a la mano me digas:
cuánto nos hemos querido y cuánto hemos compartido,
pero he vivido,
pero he vivido,
pero he vivido mi vida.
pero he vivido,
pero he vivido,
pero he vivido mi vida.
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