La vida da tantas vueltas
que no esperas tu destino,
que no esperas tu destino,
como yo que no esperaba
que en el paro iba a acabar,
y para sentirme útil,
sentirme que sigo vivo,
hago eso mal llamado,
las labores del hogar.
El trabajo más ingrato
que pueda existir en la Tierra,
y para sentirme útil,
sentirme que sigo vivo,
hago eso mal llamado,
las labores del hogar.
El trabajo más ingrato
que pueda existir en la Tierra,
sin horario, sin descanso,
sin nadie que lo agradezca,
y aunque lo hago con cariño,
y aunque lo intento,
me he dado cuenta que no es lo mismo,
que ni queriendo consigo
sin nadie que lo agradezca,
y aunque lo hago con cariño,
y aunque lo intento,
me he dado cuenta que no es lo mismo,
que ni queriendo consigo
esa cosita que le da ella,
porque en mi casa quien manda es ella.
Y no sé cómo llenar mi casa de olores,
porque en mi casa quien manda es ella.
Y no sé cómo llenar mi casa de olores,
de aromas y de sabores que sólo
consigue ella,
o hacer que cada comida sea una fiesta
con tan solo dos
pesetas,
lo mismo que lo hace ella.
Y aunque sepa que en la casa de tos ustedes
Y aunque sepa que en la casa de tos ustedes
hay millones de mujeres
tan valientes como ella,
hoy es mi día y se lo dedico tan sólo a ella,
porque es mi norte,
porque es mi guía,
porque es mi estrella,
porque mi vida sería imposible si no está ella...
¡no puedo sin ella,
no puedo sin ella!
hoy es mi día y se lo dedico tan sólo a ella,
porque es mi norte,
porque es mi guía,
porque es mi estrella,
porque mi vida sería imposible si no está ella...
¡no puedo sin ella,
no puedo sin ella!
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